Diario de Vida con Filtro

Onda con los animales

Es increíble, pero los animales nos relajan.

Cuando acaricias a un animal sientes como si éste absorviera tus ondas negativas. Es agradable hacerle cariño a los animales y es más agradable aún cuando ellos te corresponden... El otro día iba en el ascensor y subió junto a mí Wanda (una perrita blanco con negro, gigante como un San Bernardo) y su dueño. Comencé a hacerle cariño en el lomo (a la perrita, no al dueño. JA) y ella me saludó con unos langüetazos en las piernas (producto, supongo de su tasisfacción al sentirse querida y mimada por un extraño como yo). Su lengua era tan grande que me sentía como si estuviera siendo lamida por una vaca.

Mmm... Definitivamente hay lenguas con las que no me gusta tener contacto... pero hay otras que sí son bienvenidas... Como las de los gatos =P ... Prrrrrrrrrrrrr.